miércoles, 23 de enero de 2013

En este texto podemos verificar como el Nuncio Albergati, incluso a pesar de las posibles bulas procedentes de Roma, apoyó la subida al Obispado de Pamplona de Juan Rena, en contra de la voluntad de los canónigos navarros, lo que fue decisivo en las pretensiones de Carlos V del dominio de Navarra. Al año siguiente su amigo Francisco Zúñiga de Avellaneda y Velasco fue nombrado Virrey de Navarra.






Juan Rena, el veneciano Obispo de Pamplona, fue muy útil a Carlos V en Navarra.






Juan Rena, eclesiástico veneciano que fue primero confesor de Fernando "el católico" y después de Carlos V, fue nombrado Obispo de Pamplona por la recomendación de Vianesio Albergati. Desde dicho puesto se convirtió en una pieza fundamental para Castilla en su política Navarra. Juana Rena, su hija ilegítima estuvo protegida por Leonor Pacheco, casada con Martín Alonso Fernández de C. y Velasco, que sucedió como Virrey de Navarra al íntimo amigo de Vianesio, Francisco Zúñiga de Avellaneda y Velasco. Leonor Pacheco, protectora de Juana Rena, era hermana de la cuñada del Conde de Miranda.