Un contingente de setecientos hombres saboyanos del Conde Aimone de Saboya, capitaneados por Ettore di Panico, fueron los responsables de la asombrosa y milagrosa victoria de Parabiago, milagrosa por la intervención de San Ambrosio. Aimone es antepasado directo de Manuel Filiberto de Saboya, su abuelo sexto, al que sirvieron militarmente los condes de Oñate.

Ettore di Panico era el Capitán de las tropas del XVII Conde de Saboya, tío de Catalina de Saboya, esposa de Azzo Visconti, en la batalla de Parabiago; abuelo VI directo del Duque Emanuelle Filiberto de Saboya cuyos Capitanes fueron Íñigo Vélez de Guevara, V Conde de Oñate, y su padre Pedro. Aimone de Saboya es el abuelo tercero de Ludovico, II Duque de Saboya, al que sirvió Alberto Pío, abuelo de Rodolfo Pío de Saboya. El V Conde de Oñate tuvo a su servicio al "Capitán Panizo" a principios del siglo XVII.

Juan de Zúñiga y Requeséns, primo de Pedro Ruiz de Avendaño, propone a Felipe II el matrimonio de su hija predilecta Catalina Micaela con Carlo Emanuelle, Duque de Saboya, en 1584 y en 1585 Juan es nombrado Mayordomo y Ayo del futuro Felipe III.

Catalina Micaela, Duquesa de Saboya.

Catalina de Acuña, prima del Conde de Buendía Juan de Acúña, cuyo Ayo fue Jorge de Avendaño, es la madre de Marina de Tassis, Aya de Carlo Emanuelle Pío di Savoia, que en 1585 confirma privilegio de usar armas y apellido de su casa a Rodolfo Pío de Savoia, cuyo protegido es Girolamo di Panico. Catalina es la abuela del V Conde de Oñate a cuyo servicio se encuentra el "Capitán Panizo".

Francisco de Tassis, abuelo de Marina y suegro de Catalina de Acuña.